El sentimiento de que la vida se acelera, en realidad, viene de la percepción de que el tiempo da tumbos sin rumbo alguno. El Tiempo no está en nosotros, nosotros estamos en el interior del Tiempo. El 7 de junio, en el Instante se subastarán las siguientes formas de tiempo, las tres dimensiones de la existencia de los donantes, traducidas temporalmente: pasado ( consideración ), presente ( atención ) y futuro ( intención ) a las que se suma el tiempo de uno mismo.
1/ TIEMPO PASADO
En “A la recherche du temps perdu” de M Proust una impalpable gota de té es tan extensa que soporta “el edificio enorme del recuerdo”.
La vida en su capa más profunda, presenta una tupida red de sucesos relacionados, todas las cosas están entrelazadas y todas se comunican.
El donante puede donar 1 segundo, 1 minuto de su tiempo pasado.
Un segundo de tiempo que fue para el o ella una revelación.
Un tiempo que cambió y cambia su vida.
2/ PRESENTE
Sería el tiempo del Instante, del tiempo puro, el tiempo vacio de actividad u ocupación, el tiempo que hace pasar el presente y conserva el pasado.
El donante dona 25 mn de ese tiempo vacio de acción, dona serenidad, una contra – calma, un estar en el mundo de un modo completamente distinto
Aquel que existe en forma propia siempre dispone de tiempo. Siempre tiene tiempo porque él mismo es tiempo. No pierde el tiempo porque no se pierde.
3/ FUTURO
El tiempo que vendrá, el que no existe todavía, el intencional.
El donante dona 25 mn de su tiempo futuro.
Un tiempo que donará cómo y cuando quiera y concertará con el adquirente y El Instante Fundación.
4/ PUJO POR MI TIEMPO
“No tengo tiempo para nada“, decimos
¿Por qué no tenemos tiempo? ¿en qué medida no queremos perder tiempo? No tener tiempo es un mayor perderse a sí mismo que el desperdiciar el tiempo
Todo el mundo podrá pujar por su propio tiempo, 25 mn, de forma que Donante y Adquiriente serán la misma persona